Michael y Yako han vivido juntos toda su vida, son inseparables, su familia los ha dejado en la protectora por un grave problema familiar.
Michael a sus 13 años no tiene mucho tiempo por delante, pero tiene un caracter maravilloso, es un abuelito dulce, cariñoso, al que le encanta la gente y el jaleo del albergue, se le ve paseando feliz, pensamos que apenas oye pero eso no le ha afectado, os podemos asegurar que pocas veces hemos tenido un perro abuelito con tan buen caracter. No le molestan los cachorros ni los perros más jovenes que van a su alrededor corriendo, nunca gruñe ni tiene un mal gesto, siempre es agradecido, nos tiene robado el corazón.
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